¡Qué bien estaba yo en el siglo trece
cuando ni sombra ni proyecto de hombre
en la mente de Dios, era mi sangre!
¡Oh la nada perfecta! …
Poesía recitada
¡Qué bien estaba yo en el siglo trece
cuando ni sombra ni proyecto de hombre
en la mente de Dios, era mi sangre!
¡Oh la nada perfecta! …