Goza, goza, niña pura,
Mientras en la infancia estás;
Goza, goza esa ventura
Que dura lo que una rosa.
—¿Qué?, ¿tan poco es lo que dura?
—Ya verás niña graciosa,
Ya verás.
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Ya sé por qué es – Manuel Acuña
Era muy niña María,
Todavía,
Cuando me dijo una vez:
—Oye, ¿por qué se sonríen
Las flores tan dulcemente,
Cuando las besa el ambiente
Sobre su aromada tez?
—Ya lo sabrás más delante
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Mentiras de la existencia – Manuel Acuña
Dolora.
¡Qué triste es vivir soñando
En un mundo que no existe!
Y qué triste
Ir viviendo y caminando,
Sin fe en nuestros delirios,
De la razón con los ojos,
Que si hay en la vida lirios,
Son muchos más los abrojos.
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El rey de la casa – Luis Valero
Rima XII Porque son niña tus ojos – Gustavo Adolfo Bécquer
Porque son, niña, tus ojos
verdes como el mar, te quejas;
verdes los tienen las náyades,
verdes los tuvo Minerva,
y verdes son las pupilas
de las huríes del Profeta.
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